La situación de la familia ha cambiado en los últimos años. Algunos cambios provienen de grupos que han impulsado cambios en esta institución. Otros cambios han sido causa de actitudes tomadas por las mismas familias o los jóvenes que forman familias distintas. Parece que estos cambios solamente conciernen a aquellos que deciden implementarlos. Sin embargo, la realidad es otra. La situación de la familia afecta a la sociedad entera. Incluso cualquier cambio en sólo algunas familias afecta a todas las demás. Existen ejemplos de ambas situaciones.
La entrada de la mujer al campo laborar es el primer ejemplo de como el cambio en algunas familias afecta a todas las demás familias. En la segunda mitad del siglo pasado, el hombre dejó de ser el único proveedor económico en las familias occidentales. Por diversas razones las mujeres salieron a trabajar. Ésta situación creo una nueva realidad en el mercado laboral: más demanda de trabajos para la misma oferta. Esto ocasionó una disminución en el salario. Aquellas familias que solamente tenían una fuente de ingreso estaban en desventaja en esta nueva situación. A partir de ese momento fue necesario de dos ingresos. Hoy día, prácticamente pocas familias son las que dependen de un solo ingreso. En la mayoría de los hogares formados por dos cónyuges, ambos trabajan. El ingreso de algunas mujeres al campo laboral impulsó a todas las demás.
Otro ejemplo del impacto de la familia en toda la sociedad es el caso de China. En la década de los setenta del siglo pasado, el partido comunista estableció la política de un niño por familia. Esta política tenía razones demográficas. No obstante, había algunas excepciones para esta política; por ejemplo, familias rurales podían tener dos hijos si el primer hijo era mujer. Hace algunos meses el partido extendió esta excepción a todas las familias. Parece que las razones del cambio en la política son económicas. China alcanzó su pico de personas económicamente activas; a partir de ahora esa cantidad disminuirá. Asimismo, los adultos mayores son más que las nuevas generaciones. La falta de nacimientos colocó a China en una situación difícil. A tal grado que el gobierno tuvo que modificar una de sus políticas familiares más representativas de aquel país.
En ambos ejemplos, la situación de la familia afectó a la sociedad entera. Esta realidad merece la atención de todos. Los cambios en la familia pueden atraer consecuencias positivas, negativas o fatales. Aunque la familia es una institución privada, su situación es de interés público. Por ello es importante atender cuál es la situación actual de la familia. Además, si una sociedad desea ser dueña de su propio destino, deberá influir en su familia. Los cambios en la familia deben ser estudiados a la luz de estas consideraciones. Lo que hoy cambia mañana tendrá una consecuencia.